Después de muchos años, quizás este sea el primero en el que realmente me apetece reunirme con la familia, cenar, beber un poquito, pasar la nochebuena, la Navidad, el Fin de Año...ese tipo de cosas. Ya se que sonará un poco cursi, pero es como si un poquillo de aquella vieja ilusión haya vuelto. Me gusta ver las luces de noche en mi ciudad, pasear un poquito (aunque hace un frío que pela) e incluso no me molestan demasiado los chavales y los gorros de Papá Noel. Y estoy seguro de que me lo pasaría Como dios si pudiera irme de vacaciones a Nueva York en estas fechas.
Pero, como todos los años, me siguen tocando un poco las narices este grupillo cada vez más amplio de snobs que insisten y persisten en odiar la Navidad por norma y devoción. Incluso en mis peores momentos no recuerdo haber dicho o pensado cosas como "Odio estas jodidas Navidades". Sin embargo, podemos encontrar un montón de comentarios y entradas en la blogosfera en las que supuestos bloggers "alternativos" tienen que dejar constancia de la inutilidad de estas fechas, de lo que odian reunirse con la familia, de lo desorbitado del presupuesto navideño en los ayuntamientos...Bueno, en la blogosfera y en el Mundo Real, no nos vamos a engañar. No eres supuestamente "moderno" o "alternativo" si no dejas constancia de tu odio o indiferencia hacia estas fiestas.
El caso más sangrante ha sido el de la directora de un instituto en Mijas que cogió el Belén montado en clase de Religión y lo tiró a la basura. Cuidado, quizás yo sea el tipo más anti-religioso y anti-clerical del planeta, pero esa señora me ha tocado los cojones. Estoy seguro de que no tiene ni puta idea de lo que representaba ese Belén, montado con sus propias manos, para los pobres chavales. La excusa es que son un centro laico. ¿Y qué cojones tendrá que ver eso? Los chavales lo montaron en clase de religión. Y aunque no fuera así. Aunque hubiesen montado el Belén en sus horas libres. Para ellos, ese Belén representa a los Reyes Magos, los juguetes que han pedido, las golosionas que van a comer en estas fechas...Anda, no me jodas. Mas papista que el papa nos ha salido la señora directora. Y mira que yo les tengo manía a las manifestaciones religiosas y a la Semana Santal, las procesiones y todo eso. Pero a los chavales, mejor no tocarlos. Y menos aún, tocar sus ilusiones.
Dicho y descargado esto, disfrutad todo lo que podáis de estas fechas. Tomad una cervecita con los amigos, brindad con champage o con un buen cava, y si tenéis tiempo y posibilidad, buscad un huequecito y poned en la televisión "Que Bello es Vivir" (It´s a Wonderfull Life). Espero que nadie me impida ver este clásico simplemente porque salen angelitos y símbolos religiosos.
Y turrón, del duro, que es el más sano y rico.
Un brindis por todos vosotros.
Feliz Navidad.
Pero, como todos los años, me siguen tocando un poco las narices este grupillo cada vez más amplio de snobs que insisten y persisten en odiar la Navidad por norma y devoción. Incluso en mis peores momentos no recuerdo haber dicho o pensado cosas como "Odio estas jodidas Navidades". Sin embargo, podemos encontrar un montón de comentarios y entradas en la blogosfera en las que supuestos bloggers "alternativos" tienen que dejar constancia de la inutilidad de estas fechas, de lo que odian reunirse con la familia, de lo desorbitado del presupuesto navideño en los ayuntamientos...Bueno, en la blogosfera y en el Mundo Real, no nos vamos a engañar. No eres supuestamente "moderno" o "alternativo" si no dejas constancia de tu odio o indiferencia hacia estas fiestas.
El caso más sangrante ha sido el de la directora de un instituto en Mijas que cogió el Belén montado en clase de Religión y lo tiró a la basura. Cuidado, quizás yo sea el tipo más anti-religioso y anti-clerical del planeta, pero esa señora me ha tocado los cojones. Estoy seguro de que no tiene ni puta idea de lo que representaba ese Belén, montado con sus propias manos, para los pobres chavales. La excusa es que son un centro laico. ¿Y qué cojones tendrá que ver eso? Los chavales lo montaron en clase de religión. Y aunque no fuera así. Aunque hubiesen montado el Belén en sus horas libres. Para ellos, ese Belén representa a los Reyes Magos, los juguetes que han pedido, las golosionas que van a comer en estas fechas...Anda, no me jodas. Mas papista que el papa nos ha salido la señora directora. Y mira que yo les tengo manía a las manifestaciones religiosas y a la Semana Santal, las procesiones y todo eso. Pero a los chavales, mejor no tocarlos. Y menos aún, tocar sus ilusiones.
Dicho y descargado esto, disfrutad todo lo que podáis de estas fechas. Tomad una cervecita con los amigos, brindad con champage o con un buen cava, y si tenéis tiempo y posibilidad, buscad un huequecito y poned en la televisión "Que Bello es Vivir" (It´s a Wonderfull Life). Espero que nadie me impida ver este clásico simplemente porque salen angelitos y símbolos religiosos.
Y turrón, del duro, que es el más sano y rico.
Un brindis por todos vosotros.
Feliz Navidad.
Etiquetas: manías personales, sociedad
Totalmente de acuerdo. Lo que está de moda parece ser que es ir contra todo aquello que se ha hecho siempre. En España (al menos por lo que yo conozco), jamás ha dejado regalos Papá Noel. Pues ahora, los Reyes Magos no molan (porque ibana adorar a Jesús, y eso es religión, quita,quita).
Respecto a lo de la directora esa...En fin, igual no sabe que España es un estado aconfesional, no laico. Y, como bien dices, ese Belén lo habían montado los niños con toda su ilusión. A ver si hubiera hecho lo mismo de ser una manifestación de tipo islamico...