05 diciembre, 2006,12:22 p. m.
Tristón (Como el amigo de Leoncio el León)

El domingo 3 corrí la maratón de Lisboa. Ayer me dediqué a dormir y comer, a descansar y a empezar la recuperación. Estoy contento, porque alrededor del km 35 estuve a punto de caer desfallecido, de abandonar, pero saqué fuerzas, las encontré y llegué hasta el final, y entré en meta, y me dieron una medalla y sonreí de alegría, así que misión cumplida, como se suele decir. Pero esta anotación no va sobre eso. Va sobre la jodida lluvia, el jodido viento y la jodida niebla. Aquí en Galicia, donde yo vivo, llevamos más de un mes ( a mi me parece una vida) con lluvia y viento. Los últimos entrenamientos antes de la maratón han sido el dolor por culpa del viento. Y eso que me encanta correr con lluvia, es muy estimulante, pero coño...Lluvia y viento sin parar. Es deprimente. Desde la ventana de mi oficina solamente se ven riadas que caen por la ciudad, gente peleándose contra el viento, con los paraguas destrozados. Lluvia y más lluvia, viento y más viento. Empiezo a pensar que esto nunca se va a terminar.
Supongo que está relacionado con la pequeña "mini-depresión" que se te echa encima después de haber superado una meta como la maratón. Y si a esa desgana y cansancio (solo tengo ganas de comer y dormir y descansar) se une esta maldita lluvia, pues está la mesa servida.
Intentaré que mi próxima entrada no sea tan personal, y hablar de otras cosillas. Pero esto necesitaba escribirlo hoy. Se queda uno mejor, más descansadito...
Por cierto, ya estoy pensando en el siguiente reto...
Actualización: Andan como locos en mi oficina porque a un compañero le han copiado el Norton Antivirus y todos quieren una copia para sus ordenadores, que si me cuesta 50 Euros, que si el e-mail es un peligro...Dios!!! Que gusto da tener un mac y saber que no tengo que preocuparme de los virus!!! Con detalles así hasta el día más lluvioso se vuelve un poquito mejor
 
posted by joerace ¤ Permalink ¤


1 Comments:


  • At 9:18 p. m., Anonymous Anónimo

    El otro día un amigo me dijo: -si me dejas el portatil me lo cargo, yo tengo un imán para los virus-, a lo que respondí -si consigues que entre un virus te lo regalo-.

    Tengo un Mac, y sí, aun lo tengo.